Clase 1: “Revisión de la Evaluación Inicial”

¿En qué medida lo aprendido en clases me ayuda a mi formación inicial como docente?
Este blog pretende ser un ejercicio metacognitivo acerca de las cosas aprendidas en el curso de didáctica de Ciencias Naturales. En la clase de hoy analizamos la evaluación diagnóstica inicial en la cuál los alumnos del curso respondimos qué esperábamos de esta didáctica, qué queríamos aprender, qué nos gustaría aportar, qué temas de ciencia aprendimos en el taller de CCNN, qué habilidades del pensamiento científico habíamos desarrollado, cómo aprendimos CCNN en el colegio, etc.
Luego de analizar las respuestas del curso, realizamos una reflexión acerca de la educación científica en la educación primaria. Me pareció muy interesante analizar la pregunta de por qué aprender CCNN sigue siendo importante. Las respuestas fueron diversas: porque la ciencia permite expresar ideas, fomenta la curiosidad, permite enfrentar el mundo, ayuda a comprender la cultura, otorga herramientas para comprender y entender la realidad, fomenta la curiosidad propia del niño, responde a las preguntas que el niño tiene acerca del mundo y su entorno, desarrolla la autonomía y permite formular y comprobar hipótesis.
Esto me ayuda a mi formación inicial como docente porque pude construir un fundamento sólido de por qué deben enseñarse las ciencias naturales en la EGB. Creo que esta reflexión me permitirá llegar a la sala de clases a enseñar ciencias no sólo porque debo seguir lo que propone el currículum nacional, sino porque existe una certeza acerca del aporte que realiza la enseñanza de la ciencia al desarrollo íntegro del niño. Me parece que la enseñanza de la ciencia no sólo sigue siendo importante por las razones anteriormente señaladas, sino que también es una oportunidad para formar ciudadanos concientes y comprometidos, para formar valores y actitudes, es decir, para aprender de manera transversal.

Propuesta de cómo hacer una buena clase de CCNN:
A partir de lo aprendido en la clase de hoy, creo que una buena clase de ciencias debe siempre incluir el desarrollo de valores y de actitudes. Cuando enseñamos ciencias no sólo buscamos desarrollar habilidades del pensamiento científico, también debemos tener en cuenta que nuestra finalidad primordial es la formación de ciudadanos responsables e íntegros.
El sábado 12 de Abril en el diario “El Mercurio” salió un reportaje sobre los cuatro pilares que dan frutos en el aula; uno de ellos es la formación de valores. El texto señala la importancia de la dimensión socioafectiva y valórica. El trabajo en clases en torno a temas como la autoestima o las aspiraciones de los niños no sólo logran un mayor compromiso con la escuela, sino también una mejora sustancial de sus resultados académicos.
Me parece importante que una buena clase de ciencias incluya de forma implícita y explicita la formación de valores. En primer lugar, el profesor debe ser un ejemplo para sus alumnos; él debe ser una muestra de cómo se viven valores tan importantes como el respeto o la justicia en la forma de trato con sus alumnos. En segundo lugar, debe haber espacios en la clase de ciencias y en otros sub sectores en los que el alumno se sienta acogido, en los que el desarrollo integral de éste sea lo más importante y en los que el estudiante tenga que ir más allá de sí mismo.
En definitiva, una clase de calidad en la que se inculquen valores permitirá a los alumnos formarse como personas concientes de sus potencialidades y de su realidad, con sentido de pertenencia; alumnos protagonistas de su propio desarrollo.